Reseña: Carla Morrison
Se sabe capaz de influir entre sus fans. Quizá más que el resto de los artistas de su generación. Quizá porque el grueso de su público está en edad de ser influenciado o por la forma en la que le habla. Carla Morrison tiene necesidad de dogmatizar, consciente o inconscientemente.
Su show en el Teatro Metropolitan del miércoles tuvo una particularidad importante: menores de edad, adolescentes acompañados de sus padres. No pasó, por ejemplo, en el Indie Rocks durante el arranque del Ciclo 2 de Circuito Indio. La diferencia entre las entradas fue abismal. De no pasar de los tres cuartos de aforo en la Colonia Roma a un soldout en el Centro.
Desde el Estamos Unidos Mexicanos había manifestado su afán de educar. Ese día sonaba bastante lógico por lo que implicaba el concierto. Anoche en el Metropolitan no se esperaba.
Inició con un "¿Listos para el amor esta noche?". Anunció de qué iba su show entre globos blancos y luces moradas. Minutos después se quejó -entre luces de celulares- de la enajenación que genera la tecnología. "Es importante que no olvidemos la importancia de vivir y relacionarnos con los otros", consideró para rematar con "hay que aprender a soñar y hay que aprender a vivir".
Entre tema y tema, cada vez que pudo, o que quiso, habló de Dios. Del "hay que hacer las cosas como Dios manda" al "dejemos todo en manos de Dios". La divinidad en su máxima expresión.
No dejó pasar ocasión para continuar con la tónica durante el trailer de su documental titulado "Todo Pasa". Primero se quejó de las críticas que recibe por "ser mujer y por mi peso" y luego expresó: "Quiero que México esté abierto a estas cosas".
Al hablar de amor se hizo cargo. "Regalarse a otra persona es tan especial", acotó para agregar: "siempre es importante recordar que no estamos solos". Las ovaciones después de cada mandato llegaban casi por default.
Y hubo ocasión para poner el 19S sobre el escenario. "Esto nos debe hacer más fuertes, más inteligentes, más sabios; hay que agarrarnos de ahí", detalló no sin antes soltar un dardo al gobierno: "tenemos que votar, cambiar a los que están en el poder".
Su última canción, "Tu Orgullo", no podía quedarse atrás en el afán dogmatizador del concierto. "Vamos a echarle ganas a nuestro país, ¡Viva México!" dijo antes de despedirse y dejar su mensaje de paz y esperanza en el público.
Foto: Salvador Bonilla
Tags: CARLA MORRISON y su necesidad de dogmatizar, Carla Morrison en el Teatro Metropolitan 2017, Reseña, , nota de Ángel Armando Castellanos 'Araña', noticias internacionales
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