Foro Sol Reseña
El arribo del Boeing 757 (Ed Force One) a la Ciudad de México, piloteado por Bruce Dickinson, fue perfecto.
Con la intención de saldar la deuda del año pasado, donde el espectáculo de Iron Maiden llegó incompleto a nuestro país, la agrupación regresó con su gira Somewhere back in time para presentarse el pasado sábado en el Foro Sol; inspirados por la gira realizada en 1985, titulada Powerslave, y por el lanzamiento del DVD Live after death, la banda preparó uno de los espectáculos más esperados en nuestro país… y lo cumplió con creces.
El show inició con la banda mexicana Agora, una de las agrupaciones mexicanas predilectas del metal progresivo.
Después de Agora, tocó el turno a Lauren Harris, hija de Steve Harris (cosa que a la gente congregada no le importó, pues no se cansaron de abuchearla y recriminarle que se bajara). Musicalmente, su banda suena algo asi como Hard Rock. Vocalmente, tiene una voz suave, aunque algunos la comparan con Avril Lavigne... sin comentarios.
Ahora el turno es de Morbid Angel, con dos discos dentro del top 40 de los mejores de death metal y con un proyecto muy potente, pero el sonido no les ayudó lo que hubieran querido; simplemente cumplieron.
Atreyu continuó, sinceramente no suenan tan mal, a veces recordaban a Papa Roach; para muchos es una banda de Emetal (metal para Emos), para otros son Screamo, un subgénero del hard core punk y del emo.
Carcass sorprendió, ver en vivo a Carcass definitivamente no es cualquier cosa que se pueda vivir a diario. Daniel Erlandsson hizo muy buen trabajo de batería, mención aparte el español influenciado por Juan Brujo de Jeff Walker (hasta playera de Brujería traía) con diferencia de Morbid Angel, tuvieron un mejor sonido y una mejor respuesta del publico. Para muchos, rifaron más que el año pasado en el Circo Volador, pero otros, prefieren más el concierto pasado pues alegan que ahí si tocaron rolas completas y no fragmentos.
Para ese entonces, el público comenzaba a juntarse más, las gradas no se llenaron por completo. Mucho tiene que ver el hecho de que apenas hace un año vino Maiden, muchos dijeron "para que voy este año si el año pasado ya los vi ", “estará igual que el concierto anterior” decían otros; allá ellos que no saben de lo que se perdieron pues ver a Morbid Angel y Carcass ayudó a que la noche del sábado superara por muchísimo a la de hace un año.
Pasaron unos minutos después de Carcass para que la banda estelar se presentara otra vez en el Foro Sol. "Aces High" fue la que abrió el setlist después del intro “Churchill’s Speech”. "Two Minutes to Midnight" siguió para desenmascarar a aquellos que sólo habían ido por ir y que no pudieron acudir el año pasado. "Wrathchild" que ayudó a la gente a saber que esto en efecto no sería lo mismo del año pasado.
Dickinson comenzó a hablar, dijo que en esta ocasión traían canciones nuevas (que no tocaron la vez anterior) como fue el caso de "Wrathchild" y que la que seguía de igual manera iba a ser una de ellas. Se trató de "Children Of The Damned", una canción que Steve Harris cataloga como su favorita y de las que más disfruta. La noche iba a tocar uno de sus puntos máximos cuando Bruce sólo se paró enfrente del escenario y simplemente dijo: "The Phantom...". Fue en ese momento que el Foro Sol se dejó ir en un grito, Bruce repitió: "The Phantom..." y el Foro le respondió: "...of the Opera". Bruce sonrió para decir: "The Phantom... Of... ¡¡¡The Opera!!!" y las cuerdas comenzaron a sonar.
Se aproximaba una avalancha de canciones memorables, clásicos a los cuales uno no puede quedarse sin gritarlos.
El clásico que cualquiera conoce sonó, "The Trooper" jamás deja de emocionar. Después de "Wasted Years", Dickinson nuevamente comenzó a hablar, la siguiente canción hablaba de un enorme barco y duraba casi los 15 minutos, “The Rime of the Ancient Mariner",15 minutos de headbanging, coros, saltos y pirotecnia.
"Powerslave" mostró a Dickinson con esa mística máscara. Al término de ésta sonó el clásico, "Run to the Hills". "Fear of the Dark" dio oportunidad de respirar por unos breves momentos, al mismo tiempo que con encendedores y celulares se creó un movimiento de luces que hacían que el Foro Sol se viera espectacular. "Hallowed Be Thy Name" asustó a varios al creer que al igual que el año pasado anunciaba el final de la noche, pero no, después de esa canción siguió “Iron Maiden” ; y así dieron paso al encore.
Nadie dejó de gritar y corear "Maiden, Maiden", mientras, Eddie Cyborg de tres metros salió al escenario y comenzó a vernos a todos como si nos fuera a despedazar el alma, su realismo impactaba a la vista y sus ojos rojos nos hacía buscarle la mirada a como diera lugar al mismo tiempo que escuchábamos: “Woe to You Oh Earth and Sea, for the Devil sends the beast with wrath, because he knows the time is short, Let him who hath understanding, reckon the number of the beast, for it is a human number, its number is six hundred and sixty six" Canción con la que varios conocieron a la banda y que seguramente varios catalogan entre sus favoritas, por supuesto que no podía faltar en esta noche.
Pasado eso, unos acordes anunciaron "The Evil That Men Do", sin lugar a dudas emocionó a gran parte del público. Si existe una canción que defina en toda su extensión lo que es la New Wave of British Heavy Metal no cabe duda que "Sanctuary" es esa; pues fue en la que Dickinson anunció una nueva gira el próximo año con un nuevo disco, dando paso a una despedida que ninguno de los casi 50 mil asistentes desearon.
No sé, nunca había tenido la oportunidad de ver a Maiden en vivo, de ver a Eddie en el escenario en forma de momia gigantesca que movía los brazos, el Eddie Cyborg, o de esfinge, los cambios de l
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